Vacaciones Inolvidables en Bali, en Español

Entre Coco Y Coco

Bali siempre estuvo en mi lista de deseos, y cuando por fin salí de la crisis en la que me metí en la pandemia 2020 no dude en agregarlo a la lista de lugares que visitaría en mi año sabático.

Llegue de noche, cansada desde Kuala Lumpur donde no había tenido la mejor de las experiencias en mi Airbn´b , cuando llegue a mi cuarto me quede impresionada, estaba muy limpio y agradable.

Por la mañana siguiente, sentía la urgencia de caminar el pueblo, los primeros diez minutos estuvieron bien, pero al darme cuenta que no existían banquetas ni un lugar seguro para caminar, sentí la urgencia de rentar una moto aunque nunca había manejado en mi vida, no lo pensé dos veces, me subí a un taxi moto y me fui a rentar una motocicleta.

Los días siguientes sentía que había llegado a casa, ese extraño sentimiento de reconocer lo desconocido, confirmando mi creencia en vidas pasadas, en la pandemia aparte de vivir estresada por los pagos, las rentas, me dedique a leer casi todos los días, entre los muchos libros que leí me tope con Brian Weiss y su obra maestra de vidas pasadas ” Muchas vidas, Muchos maestros”

Este libro se me quedo grabado en la mente, había ocaciones en donde a lo largo de mi vida me había sentido que ya había estado en ese lugar, incluso cuando viví en Nueva Zelanda una mujer se me acerco saludando me de manera muy efusiva, como si hacia mucho que no me veía, le dije con pena que seguramente se estaba equivocando y si.

A mi me paso cuando llegue a Bali, inmediatamente me invadió un sentimiento muy familiar con el lugar a pesar de que nunca había estado aquí, también sentí como si mi vieja versión se fusionara con la nueva versión, o como si mis dos mitades se juntaran

A este capítulo de mi vida le llamo… ¡LIBERTAD!

Como pez en el agua me moví por toda la isla, en mi pequeña moto a veces con solo un cambio de ropa en mi mochila sin rumbo fijo, sin saber si me iba a quedar en algún lugar o iba a regresar a casa, me recordó el Camino de Santiago, eso me fascina no saber donde voy a acabar, ni donde voy a dormir, me gusta la incertidumbre, la aventura, en Bali cuando se empezaba a oscurecer, buscaba un Hotel para resguardarme y empezar otra vez el día siguiente, el sentimiento de libertad y aventura es inexplicable. Generalmente andaba descalza y con greña de Domingo pero me sentía la mujer más afortunada del mundo. Siempre me sentí segura, y para una mujer que viaja sola, esto es de suma importancia.

Bali: La Isla de los Dioses y yo, éramos amigos.

Después de algunos días recorriendo la Isla, me fui a Nusa Penida una de las 17mil islas de indonesia, me quede en un Bungalow donde no había turistas, los dueños no hablaban inglés . En esta Isla se recomienda quedarse por 3 días máximo, así que con dos semanas me di una clara idea de cómo era la vida local.

Una mañana calurosa me fui a correr por la selva y sentí mucho dolor en el brazo izquierdo mejor conocido como Dengue no pasaron ni 20 minutos cuando ya empezaba a sentir los síntomas, le sigio la fiebre, mareos, alucinaciones y yo no tenia ninguna farmacia en la isla para poder recurrir a medicamento, me dedique a dejar pasar los malestares tomando mucho liquido y durmiendo, pude pararme, vestirme y caminar después de dos días en cama, me traslade como un caracol, lento pero seguro a la tiendita local y compre algo de medicina o lo que encontrase, sin nadie que hablase ingles, solo encontré paracetamol.

¡MAMÁ BALI!

Regresando a Ubud, Bali, sentí que una versión nueva había nacido, y otra había muerto en aquella cama de esa remota Isla, varias personas me compartieron lo que se cree en la isla, Bali te dará las experiencias que necesitas para tu vida, será dócil, o será volcánico, me sentía fuerte, positiva, y llena de energía. ¡Me sentí diferente!

Pasaban los días y mis ganas de irme eran NULAS, como iba a dejar el lugar que me hacia sentir yo misma, definitivamente estaba viviendo la mejor de mis vidas. Todos los días aprendía de su cultura, su religión donde predomina el hinduismo, los observaba preparando sus ofrendas a fuera de las casas TODOS los días con incienso, dulces y flores. Existen templos: en cada esquina, changos por todos lados, más de 700 opciones de restaurantes en un pequeño pueblo llamado Ubud que pronto se volvío mi casa

Ubud: significa MEDICINA es un pequeño pueblo mágico donde vivo actualmente, cada día descubro algo diferente de este lugar, abundan los talleres espirituales, las terapias holisticas. Hice incontables amigos locales mezclándome entre la gente y costumbres, fui invitada a una boda tradicional, me compre la ropa local llamada Kebaya de encaje para perderme entre los invitados, asistí sola y aunque no quería llamar la atención tenía la mirada de casi todos al ser la única extranjera yo lo único que hacía era sonreír, juntar mis manos y copiar como comían. Insisto que el mejor idioma es la sonrisa. Fiel del senderismo Subí el volcán Batur, al parecer ahora esta prohibido a menos que contrates un guía local o agencia local.

LOS BALINESES

En Bali se come con la mano derecha, TODO con la mano derecha. La izquierda es la mano sucia ya que es la que usan para ir al baño. Es considerado mal visto tocar la cabeza de las personas ya que la cabeza es considerada sagrada. Hay que taparse hombros y piernas en templos y si menstrúas no puedes entrar. El transporte que sobresalta es la motocicleta desde la abuelita de 90 años, la pareja con su bebé recién nacido, la familia completa (5 integrantes) y hasta 6 perros con su dueño. El arroz es la comida más típica, existen campos de arroz a cada 50 /100 metros.

Ir a Bali te cambia, te transforma, te renueva.

Te garantizo que la persona que llega a Bali, no es la misma persona que se va.

Sampai Jumpa Lagi
(Nos vemos después)

El Artículo Más Nuevo

Deja un comentario

Abrir chat
Hola 👋
¿En qué podemos ayudarte?